Por Pedro Herrera
¿Por qué Ventanas no resistió en el movimiento?
Pasa por una cultura sindical. Aquí jamás se había hecho una huelga y tampoco pensamos que duraría tanto (11 días). La conciencia generada fue estupenda, el quiebre se produjo por una manipulación comunicacional de CODELCO que arrasó con la credibilidad del movimiento, argumentando que la mesa de negociaciones establecida en Santiago ponía fin a la movilización, siendo que nosotros habíamos instruido y comunicado lo contrario. La desesperación fue mayor y no pudimos contener y sostener a nuestra gente.

¿Qué enseñanzas pudieron rescatar de esto, entonces?
Estamos concentrados en generar el mejor clima de apoyo desde Ventanas hacia la Confederación. Tenemos que fortalecer la organización en base a la integración de otros organismos sociales y sindicales existentes en la comunidad y en eso hemos avanzado. AES GENER y Puerto Ventanas ya nos han propuesto su apoyo. Incluso nos consideran en sus estatutos como beneficiarios de sus bienes y reclamos, por eso debemos continuar nuestra fusión con otros sectores productivos como los sindicatos movilizados en la refinería de Concón. Eso habla de la solidaridad y de un movimiento que va evolucionando dentro del movimiento sindical, haciéndose cada día más fraternal.

EL LOGRO DE LA CONFEDERACIÓN

¿Qué esperanzas tienen los trabajadores del cobre con los demás sectores productivos para plegarse a la exigencia de participación?
Hemos visto como la Confederación y otros sectores como lo jueces y fiscales se van a paralizar. Eso llama la atención y quiere decir que la posición de la gente ante situaciones de discriminación laboral genera reacción de manera natural. Las precarias condiciones responden al tratamiento dado por el neoliberalismo y todo este sistema mercantil, en donde la persona pasa a ser un elemento para retribuir al empleador mejores ganancias.

¿En qué se manifiesta tu afirmación?
En los hechos ocurridos con los trabajadores forestales por ejemplo. Eso hace ver que los trabajadores se encaminan hacia un despertar y sintiendo la necesidad de sindicalizarse, asunto que refleja un proceso nuevo, porque estamos entregando las herramientas que necesitan las generaciones futuras para defenderse y negociar con poderes propios y un mismo escenario con sus mandantes.

¿En qué nivel se encuentra la discusión por una renacionalización del mineral?
Se ha discutido bastante dentro de la organización. De hecho, tenemos a dos pilares fundamentales que estuvieron en la renacionalización anterior. Se trata de Orlando Caputo y Carlos Tomic. Este último ha estado dispuesto a pasar división por división, sindicato por sindicato, educando a la gente en el tema de lo que significaría una nacionalización del mineral. Es más, hemos tenido reuniones con la gente de la Asamblea Constituyente donde concordamos en los postulados sobre la renacionalización. Tú sabes que con 30 mil firmas se puede pedir o integrar un proyecto de ley para su discusión y que puedan ser estudiados y pasar por las fases correspondientes. Nosotros acordamos que una vez terminado el conflicto firmaremos por esta iniciativa para asegurar la participación nuestra en el tema. Así avanzaremos, dignificaremos y devolveremos a Chile el sueldo que le corresponde.

¿De qué forma se embarcan en este despertar latinoamericano?
Los procesos de transformación social que se vienen dando han sido fundamentales para ir avanzando. Y Chile tiene mucho que decir. La serie de situaciones dadas en Latinoamérica, debieran colocar el tema de los mapuches, los trabajadores, la represión tal como se vive ahora. Poco a poco como sociedad hemos ido evolucionando y debemos avanzar, aportar y colaborar a este mundo latinoamericano donde debieramos -de una u otra manera- ser un aporte significativo. Por eso tenemos que juntarnos como trabajadores, en sindicatos en movimientos ideológicamente constituidos.