Tegucigalpa, 03 Jul. ABN.-

El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, se reunió la tarde de este viernes 3 de julio con el pleno de la Corte Suprema de Justicia de Honduras para hacer conocer el ultimátum promovido por el organismo para que se respete la institucionalidad democrática en la nación centroamericana.

Insulza les trasmitió a los jueces el plazo de 72 horas dispuesto por la OEA, para que se restituya en su cargo al mandatario constitucional y legítimo Manuel Zelaya, quién el 28 de junio último fue expulsado del país por un grupo de militares que colocaron a Roberto Micheletti en su lugar.

De la reunión, que se extendió por más de una hora y media, participó también el fiscal general Luís Alberto Rubi, informó la agencia de noticias Télam.

Tras el encuentro, el representante de la OEA se trasladó hacia la sede del Sistema Hemisférico en Tegucigalpa, capital de Honduras, donde fue recibido por una multitudinaria manifestación de personas que exigen el retorno al país del presidente constitucional, Manuel Zalaya.

El dirigente social y representante de la comisión de movimientos populares que se reunirá con el funcionario internacional, Luther Castillo, señaló en comunicación telefónica con el canal multiestatal de noticias Telesur que las organizaciones le entregarán un documento a Insulza.

Castillo indicó que en el texto resalta que la actual situación en el país centroamericano es consecuencia del “golpe de Estado en Honduras y del rompimiento del orden constitucional ejecutado por las cúpulas de los partidos Liberal, Democrático y Cristiano, así como de las Fuerzas Armadas que nos son más que instrumentos de la oligarquía nacional”.

Además, el documento exige la colaboración de la OEA para reinstalar la democracia en el país centroamericano y para que el Presidente legítimo retorne lo antes posible a la nación.

El mandatario constitucional de Honduras fue secuestrado en la madrugada del pasado domingo por militares y llevado a la fuerza a Costa Rica. Desde ese momento se instaló en el poder un gobierno de facto encabezado por Roberto Micheletti, quien ha reprimido fuertemente las manifestaciones callejeras en contra de ese régimen y a favor del retorno de Zelaya al país.