Retirada quedó la causa por "desordenes" imputada a Camilo Arce Rojas, estudiante de la Universidad Católica del Norte (UCN) y reportero de nuestro periódico regional "La Alternativa", quien fue detenido el 29 de marzo, fecha en que se conmemora el llamado "día del joven combatiente". El universitario fue detenido ilegítimamente y con suma violencia por parte de Carabineros y pasó más de 16 horas en el Retén de Playa Blanca.
La causa habría sido suspendida por el fiscal Hugo León, por medio de su asistente Hector Araya, probando que no hay ninguna prueba que incrimine al estudiante como un violentista. "Fui a las diez de la mañana de este miércoles 4 de abril a la Fiscalía Local de Antofagasta, como se me había citado, pero me encuentro con que la causa fue anulada. Esto representa un alivio, pero también pierdo la oportunidad de denunciar en tribunal civil las vejaciones a las que fui sometido, así como la gran cantidad de irregularidades de mi detención y cautividad. Ahora tendré que remitirme a denunciar a estos abusivos por medio de Fiscalía Militar", explicó el estudiante.
"Además de que nunca me devolvieron mi pase escolar, que será un gran problema durante todo abril, nadie podrá borrar el daño psicológico y moral que me han hecho. Aún hay gente que me ve en la calle y piensa que soy un delincuente. Lo menos que espero por parte de Carabineros son disculpas públicas. Sin embargo, creo que deberían dar de baja a los responsables de la abducción, el maltrato físico y social del que fui víctima", puntualizó el joven.
El cierre prematurto de esta causa deja al descubierto la falta de evidencia, incluso legal, y muestra que Camilo nunca participó de dicha violencia que estremeció el frontis de la UCN. Mientras, su familia mantiene una denuncia en Fiscalía Militar por el turbio proceder de parte de Carabineros. Cabe destacar que el universitario estaba en clases a la hora de los disturbios. Al salir de clases y tomar un par de fotos fue asaltado por la fuerza policial y se le inventaron cargos, lo que ha sido ratificado por personal de universidad, académicos, la Federación de Estudiantes de la UCN y sus compañeros.
Poco a poco, la verdad se abre paso y la justicia se ve obligada a abrirle los brazos a la digna labor periodística, que nadie hará callar.