Al menos 500 palestinos han muerto en la ofensiva israelí lanzada el pasado 27 de diciembre contra la Franja de Gaza, afirmó hoy el jefe de los servicios de emergencia de ese territorio palestino.

"El número de mártires alcanzó al menos los 500, entre ellos 87 niños, y el de los heridos más de 2.450", declaró el doctor Muawiya Hasenein.

"El balance de muertos podría ser mayor, porque hay un cierto número de mártires y de heridos en las calles que no hemos podido evacuar", agregó.

En tanto, el Presidente de Israel, Shimon Peres, rechazó la posibilidad de un alto el fuego en la ofensiva contra militantes de Hamas, pero dijo que su país no tenía la intención de ocupar el territorio.

Israel no permitirá hoy la entrada de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, donde su Ejército lleva a cabo desde anoche una invasión terrestre que ha causado cerca de 20 muertos y decenas de heridos, que se suman a los cientos de asesinados por los bombardeos en los días previos.

"Los puestos fronterizos con Gaza permanecerán cerrados hoy", dijo Peter Lerner, portavoz del Ejército israelí para la Administración Civil de los territorios ocupados.

Según Lerner, el cierre de fronteras a los alimentos y medicinas se debe a que la incursión terrestre ha dejado al Ejército sin capacidad operativa para manejar los pasos fronterizos.

Israel inició anoche -sábado 3 de enero- sobre las 21:30 horas locales, la invasión a la Franja de Gaza, segunda fase de la operación "Plomo Fundido", con miles de tropas de Infantería, Ingenieros, Artillería y tanques apoyados por la aviación, la marina y agencias de Inteligencia.

Esta operación es una verdadera masacre del pueblo palestino y ha mostrado la inoperancia de la ONU, organismo que no se ha pronunciado y que parece ser controlado por Estados Unidos, cómplice de Israel.