Frente a lo sucedido en las últimas horas en la República de Honduras, el Movimiento Amplio Social declara:

Rechazamos categóricamente el actuar dictatorial de las Fuerzas Armadas hondureñas, apoyadas por la derecha latinoamericana, y respaldadas por los intereses de los grupos económicos de ese país.

Manifestamos nuestro más enérgico repudio por el secuestro del presidente Manuel Zelaya, quién fuese sacado de su hogar por la fuerza y amenazado por militares armados, en un acto digno de una derecha antidemocrática, anacrónica, irresponsable y profundamente totalitaria. Asimismo, exigimos al gobierno de Chile y a la presidenta Bachelet actuar con la celeridad necesaria para condenar públicamente el golpe de Estado y reconocer en el presidente Zelaya la única autoridad legítima del gobierno de ese país.

Junto a ello, exigimos que la presidencia asegure la integridad de todos los compatriotas chilenos residentes en Honduras y del senador de la República y candidato presidencial, Alejandro Navarro y el Alcalde de Quilicura, Juan Carrasco, quienes se encuentran retenidos en aquel país por participar como veedores internacionales en el proceso constituyente impulsado por el presidente Zelaya.

El MAS exige, asimismo, al gobierno chileno que solicite a los organismos internacionales la aclaración y resolución inmediata de la grave situación en que se hayan los representantes diplomáticos de Cuba, Nicaragua y Venezuela que han sido violentamente secuestrados por parte de militares encapuchados.

Todos estos hechos, son evidencia irrefutable de la participación de la derecha política internacional en este nuevo golpe contra la democracia latinoamericana, derecha que ha sido enemiga acérrima del proceso democratizador que se extiende por toda América Latina con la consolidación de gobiernos progresistas y de izquierdas. Es por eso que emplazamos al candidato de la derecha chilena, Sebastián Piñera, a que tome posición frente al actuar de sus pares hondureños los cuales están actuando de manera idéntica a lo que hicieran con el derrocamiento del gobierno democrático de Salvador Allende, el año 1973 en Chile.

Asimismo, emplazamos al resto de los candidatos presidenciales a asumir una postura frente al proceso democratizador hondureño.

El MAS y nuestro candidato presidencial, ya la ha tomado resueltamente con su presencia directa en Honduras, en apoyo claro y enérgico a este proceso popular.