En medio del golpe de Estado que afecta a Honduras, el candidato presidencial Alejandro Navarro, quien horas antes del levantamiento de tropas cenó con el Presidente Manuel Zelaya, comentó que “si bien no ha habido hechos de violencia, en el país se respira un clima de alta tensión cívico-militar. Hay helicópteros y aviones sobrevolando la zona; los militares tienen tomadas las calles; hay humo por la quema de neumáticos; cortaron la luz. Sacaron del aire a los medios de comunicación, y el pueblo está protestando, defendiendo su democracia y a su Jefe de Estado, quien tuvo la valentía de llevar adelante esta consulta democrática, que buscaba instalar una cuarta urna en las próximas elecciones generales de noviembre, para consultar si se instalaba o no una Asamblea Constituyente, que permitiera cambiar la Constitución vigente”.

Navarro, quien viajó acompañado por el alcalde de Quilicura Juan Carrasco, invitado por la Ministra de Relaciones Exteriores de ese país, que hoy se encuentra arrestada en su domicilio, se encuentra junto a otras autoridades internacionales provenientes de distintos países de América, Europa y EEUU, quienes están a la espera de ser trasladados a sus sendas embajadas.

El presidenciable comentó que durante su encuentro con Zelaya “él nos relató con detalle lo vivido en el intento de golpe que se había producido 48 horas antes de la convocatoria a elección. En ese momento, a través de una orden del Tribunal se confiscó el material de la consulta. En respuesta al ataque, se reunieron más de mil personas afuera de la Casa de la Presidencia y resolvieron ir a rescatar el material. Para ello, se instalaron frente al Regimiento donde estaban los materiales y presionaron para su entrega. Los soldados apuntaban con sus armas el pecho de la gente. Ahí es donde entra Zelaya, quien ordenó al Teniente que dejara retirar el material, el que sacaron en 4 camiones, luego de la tensión propia del enfrentamiento ciudadano-militar”.

Navarro expresó que “decidimos venir hasta el país hermano a respaldar a un gobierno electo democráticamente, porque consideramos además, que a los amigos se les visita cuando están bien y también cuando están en problemas. Estamos con ellos en las duras y en las maduras, y más aún cuando pasan por un momento de tensión producto de querer -a palabras del Presidente- “pasar de de una democracia representativa a una participativa. Aquí lo que él buscaba era fomentar la participación real de sus ciudadanos, a través de una consulta nacional, que pretendía que en las próximas elecciones generales -presidenciales, parlamentarias y municipales- se colocara una cuarta urna para preguntar si el país quería o no instalar una Asamblea Nacional Constituyente, que trabajara con miras a reformar la actual Carta Magna que data desde 1982".

Navarro dijo que “la Carta Magna de Honduras es muy similar a la Constitución de Pinochet con la firma de Lagos, que rige en nuestro país. Hay artículos llamados "PETREOS", es decir, que no pueden discutirse ni reformarse, y si se cuestionan es traición a la Patria. Cabe recordar, además, que Honduras lleva 10 años desde que los militares dejaron el poder y que Zelaya a venido desde el Partido Liberal, acercándose a los presidentes Correa, Chávez y Ortega. Además, admira a Evo. Él es un Liberal de praxis, así se define”.